Arroyomolinos vibra con el Campus Gigantes Basket Lover

Día 27 de junio ¡¡ARRANCAMOS!! Lunes por la mañana, primer día del Campus Gigantes en su nueva sede de Arroyomolinos. Caras de sueño en los más madrugadores y a pesar de ser tan temprano, sus caras sonrientes son el presagio de lo que está por llegar. Ilusión en los que van llegando, entrega de la esperada camiseta de Gigantes Basket Lover, saludos a los amigos, primeras canastas, primeras risas, caras nuevas de nuevos amigos, expectación en estado puro.

Todo el mundo con su balón y comenzamos con un calentamiento especial en un campus especial, donde desde los más pequeños hasta los más grandes comparten juegos y diversión. ¿Y ahora? A TRABAJAR, cada uno a su canasta. La mañana transcurre entre bote y bote, entre pase y pase, entre entrada y entrada, entre tiro y tiro, entre una toma de decisión y otra. Y los entrenadores cuentan con esas canasta robadas, inevitables e irresistibles para algún alma libre que quiere ser el primero en empezar después de una explicación.

El esperado pitido, que nos acerca al desayuno Kellogg’s nos trae una merecida pausa, donde las canastas y los “partidillos” son el supuesto “descanso”. Un recreo lleno de actividad y buen rollo. Nos sumergimos en 3×3, en 5 para 5, en competiciones de tiros libre y de triples. Desafíos que acumular durante toda la semana para poder llegar a las deseadas finales de la última etapa del campus. Pero antes de todo eso… ¡¡LA GRAN SORPRESA!! la visita de Rubén Guerrero del jueves. 

Mucha emoción, entrada de Rubén en el pabellón con pasillo incluido de nuestros jugadores, y al final nuestros más pequeños, Alejandra y Mario le esperaban para entregarle el balón que nos deleitaría con un esperado y deseado mate. Aplausos y vítores en una mañana donde las inesperadas y divertidas preguntas de nuestro ocurrente jugador Oliver nos hacen sonreír y descubrir la tableta abdominal de nuestro invitado ACB. ¿Rubén tienes tableta?.

La ilusión de nuestros chicos y chicas de enfrentarse o jugar en equipo con un jugador profesional es muy especial y la calidad humana de Rubén nos muestra el lado bueno del deporte. Algo tan representativo que lo hace único y excepcional. Momentos de calidad para atesorar. Decimos adiós a Rubén en un gran día, pero todavía nos quedan dos días más por delante… entrenamientos, finales, concursos de habilidades, gymkhana, piscina, entrega de premios, en la que nuestra afortunada Ainhara se llevó las cuatro entradas de liga Endesa por ser la mejor compañera de la semana.